En la búsqueda de personas desaparecidas, como el caso de Loan Peña, se emplean perros altamente entrenados para detectar tanto restos humanos en superficie terrestre como en cuerpos de agua. El doctor Mario Rosillo, especialista en odorología forense y entrenamiento de binomios caninos (guía y perro), explicó las técnicas empleadas en este tipo de rastrillajes y los desafíos asociados.
Mario Rosillo, Médico Veterinario especialista en Odorología Forense, dialogó con Radio Sudamericana ya que la Jueza Federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, hizo lugar a los pedidos de la querella – Dr. Roberto Méndez – para realizar un rastrillaje acuático con canes de tal especialidad sobre los espejos de agua próximos al punto cero -Paraje Algarrobal- y también sobre pozos y aljibes abandonados.
Entrenamiento de perros para detección de restos humanos
El doctor Rosillo explicó que los perros entrenados para la detección de restos humanos (conocidos como perros RH) deben pasar por diversas fases de entrenamiento. Primero, los perros son capacitados para detectar olores en superficie terrestre, lo que incluye la búsqueda de restos humanos en entierros de hasta 70 centímetros de profundidad. Tras esta fase, el entrenamiento avanza a la detección en entornos acuáticos.
Rosillo aclaró que el entrenamiento de los perros para encontrar cadáveres no es el mismo que de aquel perro que busca personas vivas.
¿CÓMO AVISA QUE ENCONTRÓ ALGO?
En el caso del agua, el perro primero se entrena en la orilla, asociando el olor de los restos humanos con el agua, y luego progresa a buscar estos olores desde una embarcación.
Entonces, el guía va con el perro en una la lancha o canoa y hacen un recorrido lento. Cuando el perro detecta restos humanos bajo el agua, realiza una marcación que pueden ser: ladrar, rascar la embarcación, mover la cola, apuntar con el hocico al agua o señales como el erizado del pelaje.
Rosillo destacó que la precisión de los perros en la detección bajo el agua no es exacta, ya que los olores pueden desplazarse en la corriente o la superficie del agua. Por ello, los perros delimitan un área donde se sospecha la presencia de restos humanos. Posteriormente, esta área se marca con boyas, y es cuando entran en acción los equipos de buzos para realizar la búsqueda detallada en esa zona.
¿SE PUEDE DETECTAR UN CUERPO PESE A QUE PASARON CASI 100 DÍAS DE LA DESAPARICIÓN DE LOAN?
Uno de los retos es la cantidad de días que han pasado desde la desaparición. Según el doctor Rosillo, si bien la efectividad del perro puede reducirse con el paso del tiempo, los perros siguen siendo capaces de detectar restos humanos, incluso tras largos períodos como en este caso que ya pasaron casi 100 días de la desaparición de Loan.
El especialista remarcó que la acumulación de gases en el cuerpo, debido a los procesos naturales de descomposición, puede hacer que un cuerpo sumergido flote y posteriormente vuelva a hundirse.
